Muchos de los trabajadores migrantes provenientes del sur del país para laborar en los campos agrícolas de Guaymas y Empalme no tienen en donde vivir, y los sitios en los que se hospedan lo hacen en hacinamiento, sin las medidas sanitarias necesarias.
Juan Agustín Urías Arenas, secretario general del Sindicato de Trabajadores Agrícolas del Campo, dijo que muchos migrantes llegan sin tener antes un lugar en donde vivir, a diferencia de otros, a los que los patrones ya les tienen su espacio.
Expuso que las rentas están muy lejos de las posibilidades que tienen de pagar, y aquellas que están acorde sus bolsillos, simple y sencillamente son lugares de hacinamiento, no apto para vivir.
Comentó que hay migrantes que buscan quedarse en esta región para establecer su residencia, pero igual enfrentan serias dificultades para hacerlo, empezando por no poder conseguir un terreno en el cual construir al menos un cuartito, para empezar.
Urías Arenas indicó que en comunidades en donde hay terrenos disponibles los venden a precio de ricos, aunque con los principales servicios a la mano, “pero la verdad no es para tanto, para que vendan tan caro”.
En cuanto a los lugares en donde los migrantes sufren de hacinamiento, sería bueno que las autoridades del Trabajo, la Comisión Estatal de los Derechos Humanos y las de Salubridad realizaran recorridos para que se percataran, “aunque de antemano se sabe que no harán nada”, aseveró.